Agia Effimia, un pintoresco pueblo pesquero en la costa este de Cefalonia, brinda una experiencia de playa serena, con sus características calas pequeñas de guijarros y aguas turquesas excepcionalmente cristalinas. El mar aquí suele estar en calma, por lo que es ideal para nadar y practicar esnórquel. Aunque el pueblo cuenta con varias playas pequeñas, muchos visitantes optan por alquilar una embarcación para descubrir las numerosas calas recónditas que salpican la costa, especialmente en dirección a Fiskardo. Esta opción no solo añade un toque de aventura, sino que también ofrece la oportunidad de encontrar un rincón propio y aislado. Además, la ubicación central de Agia Effimia la convierte en un excelente punto de partida para explorar el resto de la isla de Cefalonia.
Entre las playas imprescindibles accesibles desde Agia Effimia destaca la mundialmente famosa playa de Myrtos, célebre por sus imponentes acantilados y sus deslumbrantes aguas turquesas, situada a un corto trayecto en coche. Otro lugar de interés es la playa de Antisamos, conocida por su hermoso entorno natural, donde la frondosa vegetación se une con aguas de color esmeralda, y por haber sido escenario de una película de Hollywood. Para vivir una experiencia única, la playa de Xi sorprende con su característica arena rojiza y sus acantilados de arcilla con propiedades terapéuticas. Más cerca del pueblo, la playa de Foki regala el encanto de una cala más tranquila. Existen muchas otras calas y playas hermosas por descubrir; encontrarás más información en nuestro listado completo.
Las playas de Agia Effimia y sus alrededores son principalmente de guijarros, lo que contribuye a la sorprendente transparencia de sus aguas. Si bien algunos pueden preferir la arena, las playas de guijarros poseen una belleza particular y suelen estar menos masificadas. El ambiente general es relajado y poco comercial, en sintonía con el carácter de Agia Effimia como apacible pueblo de pescadores. Para quienes busquen rincones más serenos, explorar la costa en barco es altamente recomendable, ya que muchas calas son accesibles principalmente por mar, ofreciendo así una auténtica escapada de tranquilidad.