Playa de Aguadulce

La Playa de Aguadulce es una encantadora y apartada playa ubicada en el municipio de Telde, en la isla de Gran Canaria. Reconocida por su belleza natural, la playa es relativamente pequeña, con una extensión de solo 140 metros, y cuenta con arena dorada. Se puede describir mejor como una cala, con aguas cristalinas que ofrecen una experiencia de playa única y auténtica.

La playa está expuesta a fuertes vientos, lo que resulta en corrientes fuertes que pueden dificultar la natación. Estas condiciones pueden ser atractivas para nadadores experimentados, pero también pueden hacer que la playa sea menos adecuada para estancias prolongadas. El agua en la Playa de Aguadulce se caracteriza por ser algo más fría en comparación con otras partes de la isla.

A pesar de su atractivo natural, la playa carece de instalaciones o servicios como baños, socorristas, restaurantes o duchas. Además, no es accesible para personas con movilidad reducida debido a un pequeño camino que debe descenderse para llegar a la arena. Sin embargo, la playa es fácilmente accesible en coche, con aparcamiento disponible cerca.

La Playa de Aguadulce es menos concurrida en comparación con otras playas, lo que la convierte en un lugar ideal para aquellos que buscan una experiencia de playa menos concurrida. Sin embargo, cabe señalar que el ambiente de la playa puede verse afectado por la presencia de una fábrica cercana y la basura del área industrial cercana de El Goro. A pesar de estas deficiencias, el gobierno local de Telde es responsable de mantener la limpieza de la playa.

Se recomienda a los visitantes que vengan preparados, ya que la playa tiene una mala cobertura de teléfono móvil y no hay servicios de comida disponibles. Se recomienda visitar por la mañana cuando el sol está fuera para apreciar completamente su belleza. A pesar de su falta de fama, la Playa de Aguadulce sigue siendo una joya escondida en Telde, que ofrece un ambiente intacto y una experiencia de playa única.