Beaulieu-sur-Mer ofrece una experiencia de playa refinada y tranquila en la Costa Azul, enclavada entre Niza y Mónaco. A diferencia de las grandes playas de guijarros comunes en la región, sus playas presentan una mezcla más cómoda de grava fina y arena, con el telón de fondo de la elegancia de la Belle Époque. La atmósfera de la ciudad es tranquila y sofisticada, lo que la convierte en un escape ideal para los visitantes que buscan una relajación serena junto al mar en lugar de un ambiente de fiesta bullicioso.
La ciudad alberga dos hermosas playas principales, cada una con su propio encanto distintivo. La céntrica Playa Fourmis ofrece vistas icónicas de la Villa Kérylos y es perfecta para un día cómodo junto al agua. Justo después del puerto se encuentra la Playa Petite Afrique, una favorita de las familias conocida por sus aguas más tranquilas y su entorno único bajo pinos sombríos y acantilados. Ambas ofrecen la experiencia por excelencia de la Costa Azul en calas protegidas con aguas claras y suaves.
Más allá de las orillas inmediatas de la ciudad, la costa cuenta con algunos de los lugares más famosos de la Riviera. La increíblemente pintoresca Playa Paloma en Saint-Jean-Cap-Ferrat y la dramática Playa Mala, enmarcada por acantilados, están a poca distancia y son celebradas por su impresionante belleza. Para aún más variedad, la extensa bahía de arena y guijarros de Villefranche-sur-Mer también está cerca. Para descubrir todos estos lugares y más, explore la lista más extensa de playas de nuestra guía completa.