La playa de Bossington es una joya escondida ubicada en una pintoresca aldea. Esta playa de guijarros es conocida por su tranquilidad y belleza natural, lo que la convierte en un lugar ideal para una salida pacífica. La playa está rodeada de tierras de cultivo, donde a menudo se pueden ver conejos salvajes saltando. También es un lugar excelente para los niños, ofreciendo un entorno divertido y limpio para que jueguen.
Una de las características únicas de esta playa son las hermosas vistas al atardecer que ofrece, lo que la convierte en un lugar perfecto para una tarde en familia. La playa también es conocida por sus aguas claras, ideales para un refrescante baño. Sin embargo, los visitantes deben tener en cuenta que los guijarros pueden ser duros para los pies.
Llegar a la playa implica un corto paseo desde el aparcamiento del National Trust en Bossington. Desde el aparcamiento, los visitantes deben cruzar un puente, girar a la izquierda y seguir un sendero a través del bosque. El sendero se estrecha en un 'tocón' del National Trust, y una puerta a la izquierda lleva a la playa. Para aquellos que buscan una caminata más larga, un paseo de 20 minutos hasta Hurlstone Point ofrece vistas impresionantes antes de descender a la playa.
La playa también está cerca de un río, que se puede cruzar para llegar al aparcamiento. De regreso, los visitantes a menudo disfrutan comprando jugo de manzana local, lo que añade a la experiencia general de la visita. A pesar de su belleza y encanto, la playa de Bossington sigue siendo relativamente poco concurrida, ofreciendo una experiencia de playa serena y casi virgen.
