Maratea, enclavada en la costa tirrénica de Basilicata, ofrece una experiencia de playa realmente singular. Su escarpado litoral se distingue por una sucesión de calas íntimas, imponentes acantilados y diversos tipos de playa, en lugar de las típicas largas y uniformes extensiones de arena. Aquí descubrirás una encantadora variedad: desde singulares playas de arena oscura hasta arenas doradas y costas de guijarros, todas bañadas por famosas aguas cristalinas, ideales para nadar.
Llegar a las joyas costeras de Maratea puede ser parte de la aventura: algunas playas son fácilmente accesibles, mientras que otras recompensan con un panorámico paseo o un trayecto en barco. Entre las favoritas de nuestros editores, la playa de Fiumicello es la principal y más visitada de Maratea, conocida por su comodidad y su atractivo para las familias. La célebre Spiaggia Nera o Cala Jannita cautiva con su particular arena negra y la Grotta della Sciabella, perfecta para explorar. Para escapadas familiares, la Spiaggia di Castrocucco ofrece un acceso más sencillo y aguas por lo general tranquilas, mientras que la hermosa playa de Le Vranne es un paraíso recóndito al que es mejor acceder en barco.
Además de estos lugares destacados, la impresionante costa de Maratea atesora muchas otras calas y numerosas cuevas marinas que esperan ser descubiertas. Playas como la pintoresca Spiaggia di Santa Teresa también atraen a los visitantes con su encanto particular. Tanto si buscas un ambiente animado como un retiro escondido, nuestra completa guía presenta una lista más extensa de playas para ayudarte a descubrir tu rincón perfecto en este extraordinario tramo de la costa italiana.