Playas de Punta Mujeres

El corazón del pueblo, ofreciendo una experiencia de baño única y pintoresca en piscinas naturales volcánicas, de fácil acceso para todos. Estas formaciones notables, esculpidas por antiguas coladas de lava del volcán Corona, se extienden a lo largo de más de dos kilómetros por la costa de este tranquilo pueblo pesquero de casas blancas, creando un parque acuático natural sin igual en Lanzarote. Aquí, la belleza cruda de la roca volcánica oscura contrasta sorprendentemente con las aguas cristalinas de color turquesa, que se renuevan continuamente con las mareas del océano. Esta serie de calas y piscinas resguardadas, frecuentadas por los lugareños, invita a nadar tranquilamente en un entorno que se siente a la vez salvaje e intrínsecamente parte del encanto del pueblo. La mínima intervención humana, principalmente en forma de sencillos puntos de acceso, garantiza que el atractivo natural del paisaje siga siendo primordial, ofreciendo una auténtica muestra de la vida isleña. Es un lugar donde la deliciosa interacción del sol, la lava y el mar crea una escapada encantadora, profundamente tejida en la esencia de Punta Mujeres.

Conocido por sus arenas blancas que contrastan con las rocas de lava negra y sus lagunas tranquilas y poco profundas, perfectas para un día de playa apacible. Este impresionante tramo de costa en el norte de Lanzarote, cerca de Órzola, cautiva con su sucesión de calas donde la arena blanca, brillante y fina se encuentra con las formas oscuras y dramáticas de la roca volcánica. Los flujos de lava solidificada han creado piscinas naturales llenas de aguas cristalinas de color turquesa, ofreciendo una experiencia de baño serena y pintoresca, protegida del mar abierto. A menudo descrito como un paraíso natural virgen, Caletón Blanco ofrece un espectáculo visual único y una escapada de paz. Su entorno relativamente intacto y la sorprendente belleza de su paisaje lo convierten en un punto culminante memorable.