Playa Samarincha

La Playa Samarincha, también conocida como Playa Samarinchón, es una playa semiurbana de patrimonio natural situada en el municipio de Gozón, en la región de Cabo Peñas de Asturias, España. La playa se encuentra al este de Punta Samarincha y forma parte de la Comarca del Cabo Peñas, el territorio más septentrional de Asturias. Esta hermosa y salvaje playa se encuentra en la región central de Asturias, una zona fértil compuesta por diez concejos diferentes, y forma parte de la parroquia de Luanco.

La playa se caracteriza por su superficie de guijarros lisos que se extiende a lo largo de toda su longitud y en ambos extremos. Tiene un ancho de aproximadamente 110 metros y una longitud de 120 metros. Sus atributos naturales también incluyen impresionantes vistas y un ambiente acogedor, que proporciona un entorno ideal para diversos tipos de turismo, incluido el turismo activo, arqueológico, de camping, de carreras de montaña, costero, de áreas protegidas, gastronómico, LGBT, de observación de aves, rural y de sol y playa.

La Playa Samarincha no es una playa popular entre el público y, por lo tanto, permanece en su mayoría vacía. La playa carece de un paseo marítimo y experimenta olas moderadas. Tampoco tiene ningún acceso señalizado y no es una playa nudista.

A pesar de la falta de popularidad, la Playa Samarincha es fácilmente accesible a pie. Hay escaleras que bajan a la playa, lo que la hace especialmente accesible durante la marea baja. Sin embargo, la playa no cuenta con ningún aparcamiento ni instalaciones de vigilancia. También hay una falta de infraestructura en la playa, con la excepción de una zona de amarre. No se encuentran comodidades como señales de socorristas, aparcamiento urbano, acceso adaptado para personas con discapacidad, baños, duchas, teléfonos públicos, papeleras, alquiler de sombrillas o hamacas, quioscos y áreas de buceo.

El municipio de Gozón, conocido por sus playas, acantilados y el pintoresco Cabo Peñas con su faro, gestiona la playa. El ambiente sereno y tranquilo de la Playa Samarincha la convierte en un lugar perfecto para relajarse, a pesar de que en marea alta el espacio puede ser escaso a veces. Sin embargo, siempre hay espacio para un baño, lo que la convierte en un lugar ideal para un baño matutino.