Playa Colorada es una playa apartada conocida por su arena gruesa y dorada y su hermoso paisaje. Se caracteriza por su tranquilidad y la ausencia de multitudes, lo que la convierte en un refugio perfecto para quienes buscan soledad. La playa está rodeada de selva y rocas, y los cocoteros de baja altura son una vista común, lo que añade a su encanto natural.
La playa es accesible a través de una divertida caminata, que es parcialmente pobre y muy empinada, pero ofrece hermosos miradores en el camino. El sendero se puede tomar desde Las Galeras, desviándose en el Playita Way Hostel. Sin embargo, debido a su naturaleza apartada y difícil acceso, no hay hoteles ni instalaciones cercanas de ningún tipo, incluidos los salvavidas. Por lo tanto, se aconseja a los visitantes que lleven su propia comida y agua, y que aseguren no dejar basura.
El agua en Playa Colorada puede ser agitada, lo que la hace adecuada solo para buenos nadadores o cuando el mar está en calma. Sin embargo, hay un pequeño lugar a la derecha de la playa, junto a la selva y las rocas, que es lo suficientemente tranquilo para nadar. A pesar de su belleza, la playa no se recomienda para niños debido a sus grandes agujeros y difícil acceso.
